Entre la ciudad que, aunque haya estado en otras más bonitas, tiene un algo que me enamora; las playas de la ciudad y de los pueblos cercanos, la luz, las tortillitas de camarones, los finos, la gran compañía y sobre todo, ese ambiente y esa gente que me encantan hicieron que disfrutara como una enana.
Me gustaría volver a escaparme a Cádiz en Carnavales (¿quizás el próximo año?), pero como está complicado el asunto y mientras tanto, me conformaré con ver las chirigotas. ¡Qué arte y qué guasa!.
Aquí os dejo un par de ellas de este año. Espero que os gusten y disfrutéis tanto como yo.
Y esta, con todo cariño, para los abuelos actuales y para los que sé que lo serán como desean.
He desconectado los auriculares y he puesto los altavoces.
ResponderEliminarDiego nos miraba sin entender de que nos reíamos a carcajadas su madre y yo, aunque al final, al vernos tan contentos ha acabado riendo con nosotros.
No sé como explicarlo y aunque puedan parecer tan dispares, a ti Cádiz, como Madrid, te pegan, te van a juego.
Ah, y escucha y no solamente oigas, algunas estrofas de la primera chirigota.