jueves, 6 de septiembre de 2007

Una proposición muy musical

Cuando estudio, suelo escuchar siempre música clásica, que me ayuda a concentrarme.
El domingo pasado mientras estudiaba para los exámenes que por fin he terminado, se me ocurrió algo que creo que además de bonito, puede ser divertido.

En mi mp3 estaba sonando la "Méditation del Thais de Massenet". Sin darme cuenta, dejé los apuntes y me puse a "soñar" despierta, imaginando toda una historia.
Y pensé que podría poner una pieza de música instrumental, ya fuera clásica o no, aquí y que los visitantes "pintaran" con palabras lo que les inspirara. Y que a su vez, pusieran ellos otra pieza musical y otro lo hiciera y etcétera, etcétera.

Que fuera instrumental era para evitar que la letra condicionara en parte esa inspiración, pero si alguien siente que una canción concreta le inspira, bienvenido sea. No hay reglas, sólo dejar volar la imaginación y la creatividad.
Para los remolones a quien se lo he comentado y alegan que no saben "escribir", animaos. Es intentar hacer algo bonito y divertido, poniéndole un poco de ganas. Esto no es un certamen literario y ni lo pretende (aunque a lo mejor descubrimos algún talento oculto).

Aquí van dos propuestas, una clásica y otra algo más moderna. ¿Alguien se anima y recoge el guante que lanzo?




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Canon & Gigue en Re Mayor (Johan Pachelbel) - Intérpretes: Orquesta Filármonica de Berlín dirigida por Herbert Von Karajan (1983)



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Time Never Dies (B.S.O "Antes de la lluvia") - Intérprete: Anastasia


10 comentarios:

Anónimo dijo...

Sus pies hacían crujir las hojas secas. La niebla tenía color de soledad y la mañana le pareció más fría de lo habitual. El Paseo de los Bearneses estaba desierto y solamente escuchaba sus propios pasos al caminar entre las hojas, mientras su memoria volaba a otro otoño que caminaba entre hojas secas junto al templo de Debod, igualmente solitario. Sintió en su tiempo el vacío del aire de su entorno, un crujir de hojas muertas, la soledad virgen de una leve caricia.

Turulato dijo...

La mañana era fresca y gris; apenas había amanecido cuando la saudade guió mis pasos desde Santo Domingo hacia Rosales, cruzando libre cual Sancho Quijote la Plaza de España.
Antes de llegar mi mirada se fijó, una vez más, en el pequeño templo de Debod; nunca le había prestado mucha atención, ní siquiera cuando ví como lo volvían a montar. Pero algo, quizá su soledad, tan parecida a la mía, me atrajo. Caminé despacio hacia él, mientras mi mirada iba entristeciéndose en cada uno de mis pasos.
Entré en su amparo. Y se abrieron mis ensueños.. Cual catarata de imágenes sonoras, volví a tí, a pasear de tu brazo, a recogerte entre los míos, a embriagarme con tu mirada, a ...
Me rodeaba la Rosaleda, de luces frescas; marchaba la Guardia Alabardera, cadenciosa y elegante; aspiré la fragancia del café de las terrazas del paseo; y a tu lado soñaba ser rey con Sabatini...
Al fin pudieron mis ojos a los sueños y deslicé la mirada por los tejados del Manzanares; cual Diablo Cojuelo, fuí recuperando vidas, tristezas y alegrías, miedos y esperanzas.
Mi ánimo se alzaba despacio, con suavidad, como la luz de la mañana. Todo era cual había sido. Y entendí, y así os lo confío, que he vivido. Y saberlo va templando con dulzura mi espíritu

Turulato dijo...

Mis ojos iban cerrándose vencidos por el sueño.. Era incapaz de controlar mi voluntad, como sí una fuerza encantada se hubiese adueñado de mí y me llevase entre las nubes sobre la alfombra de Aladino. Oía cada vez con mayor nitidez la chirimía..
Se despajaba la niebla.. ¡Tahuima!. ¡De nuevo allí!. Sentado en aquel pequeño café escondido, bebiendo despacio el dulce té con hierbabuena, mientras el grupo rifeño me envolvía en sus sonidos ancestrales..
Me sentí joven, fuerte y libre. ¡Es magnífico sentir como la sangre recorre brava nuestra venas!. Barrí las cadenas que me ataban y volví a sentir como mis manos apoyaban la boca de mi caballo.. Me deslicé por el Uad, aspirando el humo del recuerdo..
Mi cuerpo, mi mente, todo mi ser latía al ritmo de la música nativa.. Ritmo de corazón cálido, de la firmeza de lo sencillo...

¡¡¡Rodribañeeeeez, hombre de Dios; que está usted muy mayor para dormirse en clase!!!

Anónimo dijo...

Vengo a saludarte y a dejarte un abrazo grandote.

Anónimo dijo...

Tú lanzas el guante y lo recogen para regocijo del público.
Pero, ¿y tu texto?
Un abrazo

Silvia dijo...

Plas, plas, plas (ruido de aplausos).
A mí me parece precioso, espero que a vosotros os parezca divertido.
Oshidori, Turulato, curiosamente los dos habéis mencionado uno de mis sitios favoritos de Madrid, al que siempre regreso una y otra vez.

Apostillas, bienvenida a tu "casa". Un abrazo muy fuerte.

Fran, "cagaprisas", ya va... ¡¡Cómo te gusta mandar...!! Para la segunda música, tendrás que esperar que ahora tengo la mente llena de escenas de la película y tengo que vaciarla.

Un abrazo muy fuerte a todos

Silvia dijo...

-¿En qué piensas?
-En que si sigues acariciándome el pelo así, me voy a quedar dormida. No... – ella sonrió y señaló hacia una de las ramas del árbol que tenían sobre su cabeza - Estaba mirando esa hoja.

Él levantó la vista y clavó su mirada color chocolate en el punto que ella señalaba. Una pequeña hoja, con sus nervaduras de un color parduzco, apenas unida en un roce a la rama, soportando la brisa de esa tarde otoñal.
- Me gusta - ella comenzó a hablar en voz baja - Está ahí, a punto de caer, muriéndose lentamente porque ya no recibe alimento. Mírala, el viento la hace temblar. Aunque puede que no sea la brisa y sea miedo - Él la miró extrañado - Va a emprender un viaje que no sabe a dónde le va a llevar y dar el primer paso siempre cuesta. Pero creo que cuando se sienta flotando, mecida por la brisa, olvidará ese miedo y sabrá que está más cerca de su meta.
- Sabes qué estás como una cabra, ¿verdad? - dijo él sonriéndola - Lo que se te ocurre mirando una hoja a punto de caer...
- Quizás no hablaba de la hoja... - sin dejar de sonreír, recostó la cabeza sobre su pecho y se abrazó a él. Por el rabillo del ojo, pudo ver como la hoja comenzaba su plácido vuelo. Susurró un suerte, cerró los ojos y se quedó dormida.

Unknown dijo...

A mi me gustó. Solo puedo decir eso. Paciencia con los estudios querida amiga, paciencia con todo. Tenemos que hablar para que me pases musica clásica en mp3... hablamos guapa. Cuidate mucho y descansa.

Anónimo dijo...

Y viendo el nivel que hay aquí, ¿quieres que escriba? Deja de darle al mojito...
(Aunque digas que no sabes escribir, a mí me gustó tu texto). Eso si, me falta un texto...
Un achuchón

Mar dijo...

Me parece una idea fantástica, pero estoy vaga... la verdad :)
El día que me anime...
Besos!