martes, 12 de junio de 2012

Fútbol

A mí ver el partido de fútbol ayer, la verdad es que me daba bastante igual. Contemplaba con una mezcla de decepción y escepticismo, vista la que nos está cayendo, tanta muestra de patriotismo de merchandising (banderitas de España compradas en el chino y camisetas de la selección). Pero coincidió que en el bar dónde me fui a fumar una shisha y a tomar un té con una amiga, lo estaban emitiendo.

Yo verlo, lo que se dice verlo, no vi un pimiento. Entre la televisión y yo había una especie de farolillo que me impidía ver nada, así que me dediqué a la cachimba (que me relaja un montón), a mi té moruno y a observar el panorama.

Al poco de empezar el partido, llegó una pareja joven de italianos. Creo que entraron en el bar pensando que estaba lleno de guiris (ayer me volvieron a decir que yo tenía pinta de una) y que podrían ver el partido tranquilos. Con los primeros gritos de ánimo del resto de clientes, se fueron quedando un poco acogotados. A él, se le veía reprimir los nervios con las jugadas de Italia. Con la llegada del gol italiano, él se levantó y se fue a la calle a celebrarlo, cortado.

Pero mi vecina de asiento, con la que estaba charlando sobre Portugal y yo, nos dimos cuenta y le dijimos que pasara a celebrarlo, que estuviera tranquilo, que no iba a pasar nada.  Él pasó a celebrarlo y el resto de clientes, que animaban a España, le aplaudimos. Al rato, España marcó el gol y ellos nos devolvieron la gentileza, aplaudiendo la actuación de España. Acabado el partido, estuve charlando un poco con ellos y nos despedimos hasta la final.

Creo que es una de las veces que más he sentido el espíritu de la deportividad. Y por algo tan tonto como un partido de fútbol visto en un bar, la sensación de que con un poco de empatía por ambas partes, esa idea de Europa que a mí siempre me gustó (pero no la que tenemos ahora), era posible.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Bravo Silvia !!
Si todo el mundo fuera así ,no habría problemas en el mundo !! Todo es cuestión de educación y buena voluntad ...