lunes, 17 de noviembre de 2008

El cepillo de dientes (más conversación y pensamiento)

- Voy a lavarme los dientes. Vengo ahora. [Y después vas a ver qué bien sabe el frescor polar...]
- Si no tienes cepillo, hay uno verde sin estrenar en el cajón de la derecha del mueble [Para que luego diga, que me he acordado de su color favorito...]
- ¡Anda mi color favorito! [¿Tiene un cepillo de dientes de repuesto? ¿Él? ¿Con el que hay que pasar siempre por una farmacia de guardia para comprar condones? ¿Al que el VIPS de la esquina le va a hacer cliente del año porque compra casi todo ahí?]
- Úsalo y déjalo junto al mío, que hay hueco. Así lo tienes para otros días... [Que con el tiempo que llevamos juntos, podría quedar algún rastro de tu presencia en casa...y no sólo los condones usados en la basura].
- Bueno, eh, no es necesario... Llevo uno en el bolso. [¿Para otros días.? ¿Ein?Bueno, la verdad es que con él llevo más tiempo que el que estuve con alguno de mis novios "oficiales"]
- Mujer, así no tienes que cargar con tanto trasto...[Y cuando lo vea y no estés, me acuerdo más de ti...]
- Hombre, que es un cepillo de dientes, no un yunque. [¿A éste que le ha dado ahora?]
- ¿No te estás quejando siempre de que llevas el bolso cargado de trastos? No seas tonta, que no es molestia y puedes dejar alguno de tus trastos aquí. No me importa. [Nada, que no capta las indirectas. O no quiere captarlas].
- Ya. Si tienes razón... [¿Dejar mis trastos aquí? ¿Pero no habíamos quedado en que sólo era sexo?]
- ¿Entonces? [Venga, si estamos bien y esto puede tirar para adelante...]
- Pues no sé. Si cada una de tus amigas con derecho a roce se deja un cepillo de dientes en el baño, va a parecer una droguería, jejeje. [Porque seguro que no soy la única. Bueno, yo desde que me acuesto con él, no me he ido a la cama con ningún otro tío. ¿Pero él? Seguro que se tira a todo lo que se le pone por delante]
- ¿Has visto algún otro cepillo de dientes en el baño? [Nada. Que no se entera.].
- No, la verdad es que no [¿Soy la única? NO ME LO PUEDO CREER. Pero si pensaba que la palabra monogamia no entraba en su vocabulario...]. A lo mejor es que a las otras les importa poco su higiene dental.
- A lo mejor es que no hay otras. [Con lo inteligente que es y que estemos así...]
- ¿Pero lo nuestro no era sólo sexo? [Estoy empezando a sentir un extraño vértigo...]
- Puede pasar a ser algo más, ¿no? [Yo quiero que pase y espero que tú también]
- ¿Sí? [¿Y si dice que no? ¡Menudo fastidio! Pero si hasta ahora no me había planteado nada más serio...]
- Si tú quieres, sí. [A ver si así te enteras de una vez...]
- Tengo miedo. [¿Y si no sale bien? Me encanta estar con él y no quiero perder lo que tenemos]
- Y yo. Pero quiero arriesgarme. Creo que merece la pena [Ya está. Bien clarito.¿Y ahora qué? ¿Qué estará pensando? Se está pellizcando el labio como hace cada vez que está preocupada...Y ahora se levanta. Joder, la he cagado y se va a casa. Si es que soy imbécil.]
- El cepillo de dientes estaba en el cajón de la derecha, ¿verdad?. [De cabeza a la piscina. Espero no partirme la crisma.]
- Sí, en el de la derecha. [¡Bien!]
- ¿Sabes? A otras se las conquista con una cena romántica o con un anillo de diamantes, no con un cepillo de dientes.
- Es que estamos en tiempo de crisis... Anda, ven aquí tontorrona. Ya nos lavaremos los dientes más tarde...

7 comentarios:

Poledra dijo...

:-)))))))))))))))))

Me alegro mucho

Fran dijo...

Que yo me entere. Es ficción, ¿verdad?. ¿O me he perdido algo?. Esto tiene que ver con la conversación que tuvimos sobre el miedo al compromiso, ¿no?. ¿No vas dejando tu cepillo de dientes por ahí, no?

Turulato dijo...

Desde que está en provincias, noto al Capi algo despistadillo...
(No tengo ni idea, pero es una oportunidad única para marear la perdiz)

Por cierto. ¡Qué sensibilidad la del mocé, hasta se duele de que el único recuerdo sea un condón -goma, profiláctico, para los no iniciados- en la basura!.
Yo creía que el romanticismo era solo cosa de ellas...

Silvia dijo...

Poledra, no, no, que es ficción. Que yo sigo llevando el cepillo de dientes en el bolso.

Fran, le tengo mucho cariño a mi cepillo de dientes. La conversación, fue inspiradora.

Turu, no provoques al Capi y deja a la pobre perdiz en paz. Si además está puesto al día de mi vida sentimental, que es mi consejero en materia de hombres. ¡A ver si os entiendo un poco!.
El mocé está inspirado en un amigo, que se queja de que su amiga con derecho a roce, con la que lleva rozándose meses, no deja ni un kleenex en casa y que la única prueba de su presencia es un rastro de perfume en la almohada y los condones usados.

Besos

Fran dijo...

Turulato, no me piques que aún me estoy recuperando. Que ya pensaba que se nos había echado novio y yo sin enterarme.

Oshidori dijo...

El cepillo de dientes (ah). La crema de noche (¿eh?). El perfume (ih). El lápiz de labios (¡oh!). Las pantuflas (¡¡uh!!).
Abrazos y besos

Anónimo dijo...

qué original manera de "declarar", yo prefiero esto a una cena de esas que llaman románticas.