jueves, 6 de marzo de 2008

Cabezonería

Al leer este artículo y después de leer por enésima vez que soy una cabezota, recordé una anécdota de mi infancia.

Primero de preescolar y sólo 5 añitos. Fiestas de Navidad.
Habíamos preparado un Belén en clase. La Virgen María, san José y los Reyes Magos hechos con tambores de detergente (de los redondos), cartulinas y papel charol. La burra era un peluche y el Niño Jesús el Nenuco de alguien. El último día de clase antes de las vacaciones tocaba llevar regalos al Niño Jesús (¿quién se quedaría con los regalos?) disfrazados como pastorcitos. Y los días previos, había que prepararse.

- Mamá, yo no quiero ir de pastora, quiero ir de pirata.
- Pues tienes que ir así. No había piratas en el portal de Belén. Fueron los pastores los que le llevaron los regalos al Niño Jesús.
- Sí y los Reyes Magos. ¿Puedo ir de Melchor?
- No, no puedes ir de Melchor. Ya tenéis un Melchor que habéis hecho. Además, no tienes otro disfraz ni yo tiempo para hacerlo, que tengo que cuidar a tus hermanas. ¿Quieres ir de ángel?
- Noooooo. ¡De ángel no!. ¡Tengo otro disfraz!. El que me regaló la tía Marisa...
- Ese es un disfraz de Carnavales y no puedes ir así a llevarle regalos al Niño Jesús.
- ¿Por qué no? La hermana Asunción, mi "seño" del otro cole, me contó que el Niño Jesús es bueno y que las personas que son buenas, se alegran de que naciera y por eso le llevaron regalos. Y José Luis dice que no importa lo que tengamos, sino como seamos.
- ¡Qué cabezota qué eres! ¡Pregúntale a tu padre a ver que dice!.


Mi padre fue permeable a mis ruegos. La noticia se propagó (la propagué) entre mis compañeros y hubo algunas deserciones más en el bando pastoril. ¿Y es qué acaso las cabareteras no tienen derecho a llevarle regalos al Niño Jesús?.

Al año siguiente, la población de pastores en nuestro Belén era mínima. Eso sí, teníamos indios, vaqueros, miembros del Comando G, piratas, futbolitas, princesas...Vamos, un Belén de los más variado.

3 comentarios:

Fran dijo...

Después de leer el otro artículo y éste, lo de la cabezonería tiene que ser algo genético.
La cabaretera, para comérsela. Aunque tiene una expresión que me deja un poco descolocado...No logro "catalogarla".
Un abrazo

Oshidori dijo...

Una cabaretera lindísima y con propensión a la agitación de masas y los motines escolares.
Besicos

Turulato dijo...

¡Qué carita!.